Si quieres hacer un cambio en la oferta de tu restaurante y no sabes qué hacer, te invitamos a conocer las ventajas del menú estacional. Ofrecer productos de temporada y un menú cambiante le pone un valor añadido a tu restaurante que hará que los consumidores quieran conocer las novedades de cada época del año.
Diferencia entre menú estacional y menú fijo
El menú estacional es aquel que cuenta con alimentos que se recolectan durante una temporada concreta del año. Por ejemplo, las calabazas en otoño.
También entran dentro de estos menús los animales que se cazan o pescan durante un periodo concreto. Las épocas de caza están reguladas por cada Comunidad Autónoma, así podremos conocer fácilmente qué productos animales podremos conseguir más frescos.
Un ejemplo de menú estacional es el ofrecido por El Invernadero, cuyas opciones están sujetas a los productos de temporada, por lo que no encontrarás los mismos platos, por ejemplo, en primavera que en invierno.
El menú fijo es aquel que ofrece los mismos platos, independientemente de la época del año. No cambia a lo largo del tiempo.
Es el menú que podemos encontrar en la mayoría de restaurantes. Lo más común es que al cabo de unos años se renueve el menú, pero este cambio no tiene en cuenta los factores estacionales. Solamente es un cambio de menú fijo por otro menú fijo que se mantendrá a lo largo de unos años.
Ventajas de ofrecer un menú estacional en tu restaurante
Las ventajas de contar con un menú estacional son muchas, más aún si lo confeccionas a partir de productos locales. La agricultura local, que va al ritmo de las estaciones, a poder ser ecológica, consigue unos alimentos cargados de nutrientes y auténticos en sabor.
Platos únicos
Cada estación te brinda la oportunidad de crear nuevos platos o incluir modificaciones en los que ya tenías. Esto hace que tu restaurante ofrezca una experiencia única cada vez que se visita. El sector de la hostelería está lleno de competidores y por ello es importante ofrecer algo diferente a los consumidores que te desmarque del resto.
También debemos estar atentos a si una de las opciones de nuestro menú estacional ha destacado entre los clientes para poder repetir ese plato otros años como “plato estrella”.
Despertar el interés
Si nuestra experiencia gastronómica es cambiante, no hay lugar para el aburrimiento. Las novedades llamarán la atención del paladar de los clientes.

Platos llenos de nutrientes y calidad
Al preparar nuestro menú con productos de temporada de producción local, conseguiremos productos de mayor calidad y sabores más intensos. Al ser alimentos cultivados en su periodo estacional natural, no requieren tantos aditivos (o ninguno). Esto, además de beneficiar al sabor, también hace que, en la mayoría de los casos, sean más económicos.
Sostenibilidad
Como acabamos de comentar, al no haber necesidad de usar tantos (o ningún) producto adicional para el crecimiento de las plantas, ahorraremos recursos al planeta. Además, si optamos por agricultura ecológica, conseguiremos productos de mejor calidad, con ingredientes naturales y que no han usado productos químicos. La mejor opción es conseguir estos alimentos de agricultores locales para también ahorrar contaminación en el transporte y favorecer la economía de cercanía.
Un buen ejemplo es Murcia, que cuenta con grandes extensiones de cultivo. Un restaurante que quiera operar en esta región, puede conseguir todos o la mayoría de sus ingredientes a pocos kilómetros.
Si quieres seguir leyendo sobre técnicas para conseguir éxito con tu restaurante, te recomendamos nuestro artículo “Colaborar con influencers en tu restaurante” donde damos todas las claves para introducirse dentro del marketing en redes sociales.