El compostaje es la única solución natural para descomponer material orgánico. Dentro de esto, existen tres tipos:
- Anaeróbico
- Aeróbico
- Vermicompostaje
Todos tienen cosas buenas y malas. Pero lo que sí que es común es que el compostaje es útil para hacer abono barato para plantas, verduras, césped, los jardines e incluso venderlo. Además todos: Viviendas, restaurantes, empresas, negocios; producen materiales compostables.
Según nuestros datos iniciales de gastos mundiales, entre el 35-55% de toda la basura pertenece a cartón, comida y restos de jardinería o orgánicos. Una buena aplicación de esto es fundamental desde ya.
Compostaje anaeróbico
El compostaje anaeróbico no requiere esfuerzo. Simplemente consiste en arrojar desechos en un montón o «pila de compostaje» o incluso un compostador industrial y no mirarlo durante años.
Sin embargo, al no poseer oxígeno (ANA significa NO), algunas bacterias muy desagradables y mal olientes crecen en exceso. Esto es lo que sucede casi todos los vertederos que conocemos y no es saludable. No es saludable por la cantidad de metano que producen las bacterias, incluso provocando explosiones. Además el metano es un gas de efecto invernadero que es malo para el medio ambiente. Es cómodo hacerlo, solo necesitas espacio y por ello casi todas las plantas trabajan así. Pero es peligroso y oloroso. No nos sirve.
Compostaje aeróbico
Con el compostaje aeróbico, se introduce aire para ayudar a descomponer los materiales rápidamente. Además al ventilar, eliminas estos olores tan grandes generados por la bacterias y a su vez acelera el proceso. Si que requiere más trabajo y mantenimiento. A medida que las bacterias descomponen los desechos con alto contenido de nitrógeno, la temperatura del abono o sustrato aumentará. Esto acelera el proceso pero además puede llegar a ser peligroso. Un montón de compost puede arder rápidamente y no es seguro si no hay protocolos de contención y medida. Además, puede ser necesario añadir humedad de una manguera o regadera. Solo si no lo mantienes húmedo y olvidas moverlo olerá. Además, necesitas dejar mucho espacio para los huecos de aire en el compostaje. Es mejor pero los controles y mantenimiento exigen condiciones complicadas para su uso inhouse.
Lombricultura como gestión de residuos
La lombricomposta, vermicompostaje o compost de lombrices utiliza gusanos, oxígeno y humedad para descomponer con mayor seguridad el material orgánico, además con pocos olores. Las lombrices hacen la mayor parte del trabajo, alimentándose de las bacterias y alimentos que componen la comida. Segun nuestros estudios, la «vermicultura» es preferible a los otros métodos, por estas razones:
- Muy poco olor (debería oler a «tierra»)
- Muy pocas bacterias anaeróbicas peligrosas y metano, si es que hay alguna.
- No hay necesidad de «girar» frecuentemente
- Se puede hacer en el interior o en el exterior
- Es fácil cosechar el fertilizante, especialmente con un abono a base de bandejas
- Menor mantenimiento
- Si te gusta ir a pescar, tienes un suministro interminable de carnada