Sobre las negociaciones
Existen varios tipos de negociación. Las negociaciones puede ser la solución para conseguir unos objetivos beneficiosos mediante procedimientos y/o tratando un asunto para llegar a dicho fin.
Una de las reglas fundamentales de la negociación es saber diferenciar entre los dos tipos básicos. La negociación es un recurso super amplio, lo que significa que hay muchas formas diferentes de negociar y métodos para realizarla correctamente. Depende mucho el comportamiento, el saber actuar, el empatizar y “jugar” con astucia, entre otros factores. No obstante, hay dos tipos diferentes de negociación muy básicos que se deben diferenciar.
Los principales tipos de negociación:
- Negociación competitiva: en esta situación, los negociantes son competencia. Estas negociaciones consisten en que uno gana y el otro pierde. El posicionamiento de los servicios y los productos suelen destacar y llevarse la atención. El objetivo es conseguir el máximo beneficio posible por encima del otro “competidor”.
- Negociación cooperativa: esta negociación es de una naturaleza menos agresiva que la anterior, pudiendo adquirir un ambiente más amistoso. Al contrario que los objetivos de la negociación competitiva, aquí no se busca quedar por encima del otro sino colaborar. La negociación cooperativa busca un beneficio mutuo, de modo que todos queden satisfechos.
Ambas negociaciones son importantes. Quien trabaja de cara a un público, u ocasionalmente, seguro que mantendrá uno de los dos perfiles. No obstante todo depende del momento y la situación.
Estos son los tipos básicos de negociación, ninguno es mejor que otro, solo que funcionan mejor en diferentes situaciones. El tipo de negociación que se lleve acabo depende también mucho de la naturaleza de las personas que la llevan a cabo.
Consejo
Antes de realizar una negociación, hay que tener una información global para usar la máxima cantidad de datos posibles a favor del objetivo. Es importante estructurar dicha información en la cabeza, tener capacidad de improvisación y saber comunicar.
También es importante tener claros lo que quieres conseguir con la negociación y poder transmitir tu discurso bien orientado.