Se llama adprosumer al comprador que además recomienda el o los productos o servicios que ha solicitado. De modo que el cliente anuncia y verifica la calidad de un servicio o producto a parte de consumirlo.
Muchas veces un comprador acaba muy satisfecho con el consumo de un producto o con los resultados del servicio requerido. Dicha satisfacción puede terminar traduciéndose en gratitud y reconocimiento, y comparte su experiencia. De este modo el cliente ejerce una labor de promoción muy eficaz de una forma ajena a la marca.
Entre sus beneficios que supone este tipo de cliente, también cabe destacar el posicionamiento que puede generar. Pero esto es imposible si no se ha generado dicha satisfacción y la relación con el cliente no ha sido adecuada. De hecho, si la experiencia del cliente es negativa, puede suponer todo lo contrario, dando mala imagen a la marca.
Un adprosumer también puede ser aquel que prioriza la experiencia de otro consumidor a la promoción de una empresa. Es decir, se fía más de cómo cataloga otro un producto o servicio por encima de la publicidad que el servicio o el producto tenga.
Los adprosumer son ahora muy relevantes en Internet. Esto es debido a que un cliente satisfecho, puede comentar, promocionar y/o apoyar también de forma digital. Un ejemplo de cómo funcionaría podría ser en las redes sociales. Donde pueden realizar post o distribuir información y experiencias con las personas con las que se relaciona por las redes.
Por esa razón hay sectores que elaboran y plantean estrategias para generar clientes adprosumer. Además es muy recomendable, por ser una herramienta que puede reforzar la imagen positiva de una marca o producto. La realización de estas estrategias es posible cuando se presta atención a las opiniones de los clientes y como las comunican.