El Cross-Selling, es una práctica donde se realizan ventas cruzadas en las cuales se ofrece al cliente un producto complementario al que ha comprado.
El Cross-Selling utiliza una mecánica similar a la del Up-Selling. Sin embargo, no solo se tienta al comprador con productos alternativos al que está buscando, sino que estos también pueden ser complementarios y no similares.
Técnicas del Cross-Selling
Ofrecer productos imprescindibles: es necesario conocer al cliente a la hora de ofrecer los productos que este necesita. Por ejemplo, podemos ofrecer a nuestro cliente un producto complementario esencial en la compra que ha hecho, como la venta de los nuevos Iphone, es necesario un cargador para poder usarlo y a día de hoy estos se venden por separado.
Servicios adicionales: es una de las formas de tener ganancias más efectivas. Ofrecer un servicio único y exclusivo al cliente hace que el comprador sienta que la compra realmente es valiosa y de interés para él.
Campañas de posventa: se utilizan a los clientes que ya compraron el producto para ofrecerles una mejor experiencia y dejar claro los beneficios de nuestros productos o servicios.
Recomendaciones automáticas: consiste en que si se dispone de una web, al entrar el cliente, le salgan recomendaciones de otros compradores o recomendaciones de la web relacionadas con el producto que ha comprado o piensa comprar.
Facilitar otros canales de venta: es importante tener varios canales para que el cliente contacte con nosotros y facilitar la visita en la tienda online u offline.
Es recomendable el uso del Cross-Selling, ya que es una de las estrategias de venta más rentables.