El cuestionario o formulario es la concreción física de la encuesta. Es el documento donde queda constancia de las preguntas que serán realizadas durante el desarrollo de la encuesta. Se pueden incluir determinadas instrucciones o advertencias, las cuales deberán de ser seguidas por el entrevistador. Es decir, el orden de las preguntas y cómo debe formularlas, la omisión de algunas dependiendo de la situación, etc.
Partes que componen un cuestionario
Normalmente, cada empresa o Instituto de investigación comercial tiene su propio diseño de formulario, hay unos elementos base que aparecen en todos:
- Encabezado: el cuestionario comienza normalmente con el nombre de la empresa que lleva a cabo la investigación, logo, información de esta, etc.
- Datos de clasificación: características relevantes según la investigación como el sexo, la edad, clase social, situación personal u otros.
- Introducción: el entrevistado debe ser informado sobre el cuestionario y su finalidad. Otros datos que se le pueden facilitar son datos de la empresa que realiza el cuestionario, tiempo de duración estimado, etc.
- Cuerpo del cuestionario: son las preguntas que componen el documento.
- Datos de control: nombre y dirección del entrevistado y de quién ejecuta la entrevista. De esta forma se podrá cotejar si la encuesta ha sido verdaderamente realizada o no.
- También es necesario detectar otros tipos de anomalías que hayan podido producirse a lo largo del proceso.
Tipos de preguntas
Se pueden incluir diversos tipos de preguntas. La distinción más común es la que clasifica las preguntas cerradas y abiertas.
Las preguntas cerradas: son aquellas que prevén las posibles respuestas, como preguntas de sí o no, sin dar posibilidad de respuestas distintas. Ejemplo: ¿Cuántos hijos tienes? A) 0 B)1-3 C)4 o más. Este ejemplo en concreto es una pregunta dicotómica, ya que contempla más de dos posibles respuestas.
Las preguntas abiertas: son aquellas que en principio no se ha previsto una respuesta concreta. Por ejemplo, ¿Qué opina usted de los servicios que ofrece la compañía “X”? ¿Qué propuestas ofrecería para mejorar? No son las preguntas más recurrentes, ya que son más difíciles de leer y manejar que las anteriores, debido a opiniones y descripciones más elaboradas, perfiles con diferentes puntos de vista, etc. Además luego se hace la selección de las que se deben agrupar y codificar.
Luego también existen las preguntas semicerradas, que son una mezcla de los dos tipos de preguntas mencionados anteriormente. Suelen ser cuestiones de respuesta múltiple donde se prevé la posibilidad de no haber contemplado todas las respuestas posibles. Lo que significa que deja una de ellas (normalmente la última) abierta. Ejemplo: ¿Qué prefieres comer con los compañeros de trabajo? A) Café B) Tostadas C) Un bollo D) Otras (especificar cuales).
Otras preguntas son las de filtro, estas tienen la finalidad de seleccionar un grupo de individuos. Y otro ejemplo también común son las preguntas de control, que pretenden comprobar la veracidad de los datos obtenidos.
Redacción del cuestionario
Antes de redactar el cuestionario, se debe de haber elaborado previamente un esquema de carácter orientativo. Esto es necesario para tener fijado el o los temas a tratar, los tipos de preguntas que se van a formular, su orden, etc.
El lenguaje del cuestionario debe ser sencillo y fácilmente entendible por los individuos que integran la muestra que debe responder. Las preguntas deben ser claras y para ello es conveniente que sean escuetas. Si las preguntas son demasiado largas, la experiencia puede ser monótona y que pierda interés por parte del entrevistado.
La estructura planteada debe ser lógica: debe ir de los temas generales a los temas particulares, de lo obvio a lo más comprometido.
Prueba del cuestionario
Redactado el cuestionario, conviene probarlo para intentar corregir los problemas y dificultades que pueda plantear su aplicación. Dependiendo de los resultados de la prueba se puede comenzar a poner en práctica, se incluyen correcciones necesarias o se añaden o eliminan propuestas.